Escrito por: Mariel Hernández Maldonado
El cambio climático ha sido un tema preocupante para los expertos desde hace más de una década, pues advertían desde siempre que de no cambiar nuestras costumbres de consumo y producción desmedida, nos veríamos de frente con los resultados angustiantes y fatales para la humanidad. Nunca faltaba el optimista que atribuía todas estas afirmaciones a paranoicos de la teoría de la conspiración, pero ahora es innegable el cambio que está frente a nosotros.
Empezando por la desaparición de las estaciones del año o la exacerbación de algunos de sus elementos como los increíbles calores de verano que han estado azotando diferentes partes del mundo por los cuales muchos niños y ancianos han muerto mientras que en otras partes las lluvias torrenciales y granizadas han provocado tragedias irreversibles como la granizada que hace tan solo unas horas dejó como saldo dos muertos y dos desaparecidos en el Estado de México.
Nosotros podemos pensar que es natural que estos cambios extremos se den frente a nuestros propios ojos, sin embargo al preguntar a personas de la tercera edad sobre el clima en sus tiempos, todo lo que ven hoy en día les parece un indicio claro de que vamos hacia una catástrofe mundial.
Apenas la semana pasada los científicos de la NASA confirmaron que el nivel del mar subió 8 centímetros en todo el mundo desde 1992, provocando aguas más frías en todo el mundo a causa del deshielo acelerado que se presenta en los polos. Fotos de osos flotando a la deriva en bloques de hielo desprendido de lo que alguna vez fue su hábitat y la famosa foto que recorre las redes sociales de un oso polar desnutrido nos hablan un poco más claramente sobre la situación de alarma por la que estamos pasando.
En los últimos años el nivel del mar está aumentando más rápidamente que hace 50 años, lo que se cree que empeorará no muy lejos en el futuro, pues se ha previsto que mientras algunas zonas como México pasarán por un fuerte desabasto de agua, habrán otras que verán aumentada notablemente la cantidad de humedad en el ambiente.
Se cree que con el nivel de deshielo que se está presentando, las personas que viven a un metro del mar como es el caso en muchos lugares de Asia, se verán enfrentados a la destrucción total de sus lugares habitacionales. Si bien puede ser algo tarde para empezar a hacer conciencia, sí se puede reducir la velocidad con la que nos vamos a la deriva empezando con acciones como reciclar, intentar reducir gastos absurdos, evitar consumir productos que dañan a la capa de ozono como aerosoles y sobre todo evitar la tala de árboles.