Escrito por: Mariel Hernández Maldonado
En el mundo hay diferentes zonas arqueológicas que despiertan la curiosidad de los visitantes y arqueólogos ya sea por el tamaño o la manera en la que están construidos; tenemos la Muralla China, la Pirámide de Kukulkan y por supuesto el famosísimo sitio Stonehenge en Inglaterra que despierta las dudas por el gran tamaño y la forma en que las piedras están apiladas sin haber necesitado de la maquinaria moderna de la que hoy contamos, un posible resultado del cambio climatico que debemos tener en mente.
Este sitio arqueológico data del siglo XX a.C., está ubicado en Amesbury a quince kilómetros al norte de Salibsury en Inglaterra, dentro de un foso circular que mide 104 metros de diámetro. El traslado de las piedras al lugar en donde hoy en día se encuentran es lo que ha causado especulación en todo el mundo, pues con ruedas de piedra o madera no se habrían podido conservar en el estado en el que están el día de hoy. Se ignora el objetivo de esta construcción.
Después de crear decenas de teorías en torno a este maravilloso sitio arqueológico, un grupo de científicos de Gales asegura haber encontrado evidencia de que sendas piedras fueron movidas de lugar por acción de los glaciares y no de personas como anteriormente se había especulado.
Brian John, científico que encabeza la investigación junto con su equipo han asegurado que gracias a diferentes formaciones geológicas y sedimentos las piedras se movieron de lugar junto con la última glaciación que tuvo lugar hace alrededor de 20 mil años.
Las teorías más famosas
Tantos años investigando el origen y alineamiento de dichos monolitos han arrojado varias teorías que durante años no se han desmentido ni comprobado:
- Un antiguo sitio de entierro. Algunas investigaciones han arrojado resultados que proponen que dichas piedras fueron parte de un cementerio utilizados únicamente por los miembros de la élite religiosa o política de ese entonces.
- Sitio de curación. Otras teorías apuntan a que este sitio era popular para buscar la sanación espiritual, esto basándose en los esqueletos encontrados alrededor del sitio pues presentaban signos de enfermedad o lesión.
- Paisaje sonoro. También se cree que por la distribución de las piedras, este lugar pudo haber servido de paisaje sonoro, pues las ondas se anulan entre sí y el sonido se bloquea; las reverberaciones de este sitio son comparables con las de una sala de conciertos o catedral a pesar de estar al aire libre.
- Observatorio celestial. Hay personas que piensan que el sitio está conectado con el sol, por lo que se llevan a cabo rituales de solsticio de invierno.
Tal vez nunca sepamos cuál es el verdadero objetivo de esta zona arqueológica, pero definitivamente seguirá siendo uno de los lugares más bellos de la tierra.