Es definitivamente un placer empezar una mañana con una buena taza de café humeante, ya sea americano, cappuccino, espresso, moka, descafeinado, con leche, vienés, etc., el café es un deleite para los sentidos, deleite que no solamente tiene como ventaja el excelente sabor, sino las propiedades nutritivas y alimenticias que trae consigo una sola taza de este delicioso elíxir.
Estudios han revelado que después del agua, el café es la bebida más consumida alrededor del mundo, esto es una buena noticia para México, quinto productor a nivel mundial de dicho grano, sin embargo, mucha gente sigue creyendo en los mitos sobre el café y sus supuestos daños a la salud de quienes lo consumen, es por esto que el consumo por persona de café en el país asciende solamente a 1.2 kg, siendo que en otros países como Estados Unidos, Brasil y Suecia, el consumo por persona llega incluso a los 8.2 kilos.
La importancia del consumo de este grano recae en el hecho de que este maravilloso producto agrícola es uno de los que genera más empleos y recursos en el nivel rural en general; la siembra y cosecha de café da empleo a cientos de familias campesinas.
En el país, son más de 10 estados los que se dedican a la siembra de tan valioso grano, entre ellos, los más famosos son Guerrero, Puebla, Oaxaca, Chiapas y Veracruz, siendo estos dos últimos estados los únicos que cuentan con denominación de origen. Es el café uno de los recursos naturales más importantes con el que cuenta el país.
Desde hace tres décadas, el café que produce el país es orgánico, siendo esta alternativa la más conveniente para los productores, ya que ayuda a que el equilibrio ecológico de los suelos no se descompense, esto evita el uso de químicos en los suelos para no contaminar ni alterar la composición de los suelos de cosecha, permitiendo también que los desechos de la siembra del café funcionen como composta.
En Japón y Suiza, países que no son productores de café, se ha encontrado con el café de la mejor calidad para el consumo, ya que importan café de las mejores regiones del mundo y hacen sus propias mezclas, logrando sabores que no se encuentran en otros recursos naturales del mundo.
Según estudios de la Universidad de Harvard, aquellas personas que tienen un alto consumo de café, tienen menos riesgos de sufrir de depresión.