Las visitas anuales por afecciones relacionadas con la contaminación del aire se han multiplicado. De acuerdo con información proporcionada por organizaciones civiles durante la presentación del documento ‘Recomendaciones de política pública para mejorar la calidad del aire en México, una visión compartida”, en el área que comprende la zona metropolitana y el valle de México se reciben alrededor de mil quinientas visitas relacionadas con la mala calidad del aire. Entre las afecciones sobresalen infecciones de ojos, asma, enfermedades respiratorias, enfisema pulmonar y alergias. Otro dato alarmante concierne al número de muertes provocadas por contaminación ambiental, que tan sólo en el 2010 dio un total de 14 700 en el país.
Según se ha dado a conocer, en los hospitales de la ciudad de México y Monterrey las visitas se incrementan cuando se registra un aumento en la concentración de partículas en el aire, finas (PM10) o ultrafinas (PM2.5), como el dióxido de nitrógeno (NO2). De acuerdo con la directora de investigación de Desarrollo Urbano del Instituto Mexicano para la Competitividad, Gabriela Alarcón, esto demuestra un estrecho vínculo entre el nivel de contaminacion en Mexico y el aumento de las enfermedades.
La directora de investigación de Desarrollo Urbano del Instituto Mexicano para la Competitividad hizo hincapié en la necesidad de hacer caso a las declaraciones de precontingencia en el Distrito Federal. Así, si se consiguiera detener los niveles de contaminantes en estas ocasiones, como determina la Norma Oficial Mexicana para partículas suspendidas, podrían disminuir en consecuencia hasta mil 517 visitas anuales a los centros de atención médica. De acuerdo con Alarcón este logro se traduciría en un ahorro 24 mil 233 pesos por cada paciente.
Además, indicó que el disminuir el número de pacientes que se hospitalizan por afecciones relacionadas con la calidad del aire, podría implicar tan sólo en el Distrito Federal un ahorro en el sector de la salud de hasta 37 millones de pesos. A su vez, esto implicaría un ahorro para las empresas locales, derivado de una disminución de ausentismo laboral, de hasta 1.25 millones de pesos. Aragón concluyó que si se cumplieran adecuadamente los estándares que la Organización Mundial de la Salud recomienda podrían generarse ahorros en el sector salud de hasta 92.7 millones de pesos y, al mismo tiempo, aumentar la productividad laboral que sumaría hasta 3.2 millones de pesos al año.
Una vez dadas a conocer estas cifras, los especialistas han hecho propuestas con el fin de actualizar las normas federales relacionadas con la calidad del aire; dichas normas que se encuentran a cargo de COFEPRIS y establecen las concentraciones máximas de contaminantes en la atmósfera, deberán ser alineadas con los esquemas que dicta la Organización Mundial de la Salud (OMS).